Establecer límites y gestionar el bankroll

La precacución es esencial en las apuestas deportivas y te enseñamos cómo hacer buen uso de ella.

Adaptar límites a tu actividad de apuestas es un aspecto importante del juego responsable. Te ofrecemos algunos consejos para establecer control en tus apuestas:

  • Organiza un presupuesto: antes de empezar a apostar, fija una cantidad de dinero que puedas permitirte perder. Esto te ayudará a evitar caer en la tentación de gastar más de la cuenta y moderar tus pérdidas.
  • Define un límite de tiempo: determina cuántas horas a la semana quieres dedicar a tus apuestas. Una vez que alcances ese tope, deja de apostar hasta que ya puedas hacerlo de nuevo.
  • Establece límites de depósito: muchos sitios de apuestas online, como Betfair, te permiten crear límites de depósito para ayudarte a controlar tus gastos. Decreta la cantidad máxima que quieres ingresar y atente a ella.
  • Define un tope de pérdidas: especifica cuánto dinero estás dispuesto a perder antes de no apostar más para lo que resta semana. Cuando alcances el límite, cierra sesión y tómate unos días de descanso.
  • Establece límites de ganancias: fija la cantidad de beneficios que pretendes obtener antes de dejar de apostar durante la semana. Una vez alcanzado ese límite de ganancias, será momento para descansar.
  • Tómate descansos: es importante darse un tiempo alejado de las apuestas para evitar engancharse demasiado a la actividad. Disfruta de descansos regulares y haz otras actividades que te ayuden a mantener un equilibrio saludable.

Recuerda que el juego responsable implica establecer límites y atenerse a ellos. Si sientes que estás perdiendo el control de tu actividad de apuestas, busca ayuda profesional.

Cómo gestionar el bankroll

La gestión de tu bankroll es un componente clave del juego responsable. Te ofrecemos unas recomendaciones para gestionar tu bankroll de forma eficaz:

  • Determina el tamaño de tu apuesta: decide cuánto dinero quieres apostar. Una regla no escrita es no jugar nunca más del 5% de tu bankroll en una sola apuesta.
  • Lleva un registro de tus ganancias y pérdidas: anota tus beneficios y pérdidas para entender mejor tu actividad de juego. Te ayudará a reconocer patrones o tendencias que podrían ayudarte a mejorar tu productividad.
  • Utiliza estrategias de gestión de fondos adecuadas: emplea estrategias como el Criterio de Kelly o las apuestas de Fracción Fija para gestionar tu bankroll de forma más eficaz. Estas tácticas se basan en ceñir la dimensión de tu apuesta al tamaño de tu bankroll y del valor percibido de cada apuesta.

¿Qué es el criterio de Kelly?

El criterio de Kelly es un enfoque utilizado para gestionar el riesgo y maximizar los beneficios a largo plazo.

Es una fórmula matemática utilizada para saber el tamaño óptimo de una apuesta, teniendo en cuenta la probabilidad de éxito y la relación de pagos. Kelly se basa en la idea de apostar una fracción del bankroll que sea proporcional a la ventaja esperada en una apuesta en particular. La fórmula es:

f = (P * B - Q) / B

  • f es la fracción del bankroll que se debe apostar.
  • P es la probabilidad de éxito.
  • B es la relación de pagos (beneficio potencial / por la cantidad apostada).
  • Q es la probabilidad de pérdida (1 - P).

El criterio de Kelly propone que debes apostar la fracción f del bankroll en una apuesta si f es mayor que cero y evitar la apuesta si f es menor o igual a cero.

Sin embargo, es importante tener en cuenta que el criterio de Kelly puede resultar agresivo y no adecuado para todos los apostadores, ya que implica asumir un riesgo elocuente.

¿Qué es la estrategia de apuestas de fracción fija?

La estrategia de apuestas de fracción fija implica apostar una fracción constante del bankroll en cada apuesta, independientemente de la ventaja o desventaja percibida en la apuesta.

Por ejemplo, un apostador puede decidir jugar siempre el 2% de su bankroll en cada apuesta, sin importar las cuotas o los potenciales beneficios.

La estrategia de apuestas de fracción fija tiene la ventaja de ser simple y fácil de seguir. Ayuda a limitar las pérdidas y a mantener una gestión de riesgos consistente.

Sin embargo, puede resultar menos efectiva en maximizar las ganancias a largo plazo, ya que no tiene en cuenta la ventaja percibida en cada apuesta. No es lo mismo apostar 10 euros a una cuota 1.4, que 10 euros a una cuota 5.6.