¿Qué sucede cuando un ingeniero cambia de escudería en la Fórmula 1?
Hay ingenieros que pueden estar tres meses en compás de espera y hay algunos que incluso llegan a estar una temporada completa
Los pilotos no son los únicos que cambian de equipo en la Fórmula 1, también hay un importante mercado de ingenieros
Esta temporada, la Fórmula 1 vivirá una de las 'silly season' más convulsas de su historia con 14 de los 20 pilotos de la parrilla pudiendo cambiar de equipo al finalizar su contrato. Puede que los conductores copen los titulares y los grandes salarios, pero no es menor cierto que hay otra rama que se mueve activamente en el mercado y corresponde a los ingenieros.
Los buenos, para que se hagan una idea, cobran millones de euros y no pueden moverse de una escudería a otra de un día para otro. Existe un término conocido como 'gardering leave' (tiempo de barbecho en castellano) que consiste en que un ingeniero debe avisar de que ha firmado con otra escudería y entonces se establece el tiempo que tardará en incorporarse a ese nuevo equipo.
Los ingenieros, en su contrato, tienen establecido esa fecha de 'gardering leave' antes de dejar la escudería y éste se delimita dependiendo de sus conocimientos de los coches, estatus dentro del equipo y cuestiones varias. Hay ingenieros que pueden estar tres meses en compás de espera y hay algunos que incluso llegan a estar una temporada completa. Hay que tener en cuenta que muchos ingenieros conocen tanto del presente como del camino de desarrollo de cara a las siguientes temporadas.
¿Qué hacen durante este tiempo?
Los afectados por el 'gardering leave' siguen cobrando de la escudería de la que se van a marchar hasta el último día, pero obviamente cambian sus funciones para que los conocimientos que tiene del coche no se los traslade a la nueva marca a la que se va a marchar. En general, son apartados durante todo este tiempo para que no conozcan ninguna novedad que luego puedan contar a su nuevo empleador, aunque a algunos se les reutiliza en otras divisiones de la marca.
Pese a ser despedido a ojos de todo el mundo, el jefe de Ferrari de 2020 a finales de 2022 no ha podido fichar por ningún equipo en todo el pasado 2023 para no trasladar nada de los planes del 'Cavallino Rampante' a ninguna escudería rival. Y en la actualidad cumplen este 'gardering leave' los ex jefes de Alpine y de Haas, que fueron despedidos en el transcurso de la pasada temporada. Todos ellos siguen cobrando mientras el barbecho está en vigencia.
Hay escuderías que aceleran el proceso
En algunas ocasiones, son las propias escuderías las que se sientan a negociar para acortar el 'gardering leave' dependiendo de la necesidad de los equipos. En algunos casos se pagan jugosas indemnizaciones para liberar meses antes a un ingeniero que puede dar un cambio radical a un monoplaza y casos en la historia de la Fórmula 1 hay varios.
No hay que perder de vista que la Fórmula 1 es una competición en constante evolución y que, por ejemplo, el McLaren de hoy no se parece en nada al de hace seis meses. Los equipos del Gran Circo invierten millones y millones de euros en evoluciones y muchas veces los conocimientos de un ingeniero que se queda congelado en el 'gardering leave' pueden servir de poco.
En cualquier caso, estos ingenieros son mucho más penalizados que unos pilotos que cambian de colores y en apenas dos meses pueden estar conduciendo un coche de la competencia. También es cierto que pocos pilotos tienen la formación técnica necesaria como para conocer los secretos de sus coches, más allá de una cuestión de sensaciones al volante.
En la Fórmula 1, la información es poder y por este motivo existe esta norma del 'gardering leave' que en otros deportes como el fútbol, baloncesto o tenis sería absolutamente impensable y disparatada. Pero que a nadie se le olvide que buen ingeniero puede marcar tantas o más diferencias que un piloto en una temporada.