Messi y el Barcelona, el Mundial de Clubes y la polémica FIFA
Leo Messi y su Inter Miami han accedido al nuevo torneo de la FIFA de una forma poco ortodoxa: ganando la Supporters Shield
El Inter Miami ha sido confirmado como el equipo que representará a la MLS en el primer Mundial de Clubes de la FIFA. El club de Florida ha recibido esta distinción con cierta polémica, puesto que ha ganado un título que no tiene relevancia como la Supporters Shield y suscitando todo tipo de comentarios, especialmente en las redes sociales.
Este trofeo se entrega al mejor equipo de la temporada regular de la MLS y el club presidido por David Beckham lo ha ganado en esta temporada 2023/24 por primera vez en su historia. El equipo se impuso a Los Angeles Galaxy, los líderes en la Conferencia Oeste, al superarles en puntuación global al conseguir un total de 74 puntos por los 64 de los californianos.
Gianni Infantino se apresuró a anunciar que Messi y sus compañeros estaban dentro del Mundial sin que se hayan jugado los Play-Offs de la competición. En esta competición se entrega la MLS Cup, el título de facto para el campeón del torneo y que actualmente defienden sus rivales de Conferencia, los Columbus Crew. Así, el Inter de Miami estará en la cita mundialista y el Barcelona no.
Un ejemplo sospechoso
El máximo dirigente de la FIFA tomó esta sorprendente decisión que pone en duda la meritocracia en la competición, y para muestra un ejemplo. ¿Se imaginan que la UEFA entregase un trofeo al equipo que más puntos suma en la fase de grupos de la Champions League? No tendría demasiado sentido, teniendo en cuenta que lo importante se disputa en las eliminatorias.
Infantino, sin embargo, hizo este movimiento para asegurarse la presencia de uno de los jugadores más mediáticos del planeta en su competición. El suizo no duda que la FIFA recibirá mayor interés y repercusión con Messi a bordo, pero se ha cargado un poco el espíritu de una competición donde los equipos se han clasificado por una serie de criterios y normas, y que en el caso del Inter Miami parece un dedazo a todas luces.
Si nos atenemos a los resultados de las últimas temporadas en la MLS, el equipo más dominante ha sido Los Angeles FC. El club tiene una corta historia de apenas seis años, pero han sabido trabajar hasta ganar la MLS en 2022 y ser los finalistas de la edición de 2023 cuando perdieron contra Columbus Crew, otros que tampoco han sido invitados.
Pensando en un reencuentro
El Inter Miami además disputará el partido inaugural de la competición y lo hará jugando en casa en el Hard Rock Stadium para mayor trato de favor. A Infantino le interesa que Messi y la vieja columna vertebral del último Barça que ganó la Champions llegue lo más lejos posible... y quién sabe si cruzándose con el Real Madrid.
El club cuenta con los excapitanes culés Sergio Busquets y Jordi Alba en sus filas, así como con el goleador Luis Suárez acompañando a un Messi que podría incluso tener más refuerzos de cara al Mundial de Clubes. Nombres como los de Ángel di María o incluso Sergio Ramos han estado sobre la mesa.
Lo que parece evidente es que la FIFA ha jugado un papel importantísimo para que Messi esté en el torneo, después de 'pegarse un tiro en el pie' con las normas para la clasificación de algunos equipos como el Barcelona, que no se clasificó.
Infantino también estuvo torpe con las normas en Asia. Si hubiese sido un poco más avispado, podría haber conseguido la clasificación del Al-Nassr de Cristiano Ronaldo, quien por cierto sí consiguió un título de verdad ganando el Campeonato de Clubes Árabes.